Salir de nuestra zona de confort tiene unos enormes beneficios para nuestra salud física y mental. Puede aumentar nuestra confianza, estimular la creatividad y ayudarnos a sentirnos más comprometidos con nuestro día a día. Probar cosas nuevas ayuda a mantener tu mente sana y ágil.

Entonces ¿por qué no probamos cosas nuevas más a menudo? La respuesta suele ser: miedo.

Los estudios demuestran que tenemos miedo a lo desconocido, a lo que podría pasar si salimos y probamos algo diferente.  Si somos honestos, a veces parece más fácil y seguro seguir haciendo las cosas a las que estamos acostumbrados.

Te dejamos 4 consejos rápidos para cuando estes listo para comenzar a salir de tu zona de confort:

Recuerda los beneficios de hacer el intento: ¿conoces la palabra clave para hacer cosas nuevas? Probar. Incluso el proceso de probar algo nuevo es beneficioso. No tienes por qué ser bueno en esa actividad o incluso comprometerte a hacerlo más de una vez. Pregúntate cuál podría ser el beneficio de intentar algo nuevo, ¿qué podrías aprender o cómo podrías sentirte?

Prepárate para el peor de los casos: el miedo a lo desconocido es difícil. Nuestros cerebros no saben exactamente lo que sucederá, por lo que a menudo pensamos en lo peor. Pero pensar lo peor en algunos casos puede ayudarte a prepararte para lo desconocido y sentirte más seguro para embarcarte a una nueva aventura.

Mentalidad de expansión: el miedo al fracaso nos mantiene atrapados en la misma rutina. Pero cambiar nuestra mentalidad de “Soy muy malo en esto y no mejoraré” en “Mejoraré con el tiempo”, puede ayudar a replantear la forma en la que pensamos sobre probar algo nuevo. O mejor aún, olvidarnos de ser buenos en algo y solo probar para divertirnos.

Entonces ya sea que te estés desafiando a ti mismo para probar una aventura completamente nueva o simplemente